Ficha técnica:
Título original:
Código Emperador
Director: Jorge Coira
Duración: 95 min
País: España
Idioma: Español
Intérpretes: Luis Tosar
Alexandra Masangkay,
Georgina Amorós, Denis
Gómez, Miguel Rellán,
Laura Domínguez, María
Botto, Fran Lareau.

Sinopsis: Juan trabaja para los servicios secretos; con el fin de tener acceso al chalet de una pareja implicada en el tráfico de armas se acerca a Wendy, la asistenta filipina que vive en la casa y establece con ella una relación que se irá volviendo cada vez más compleja. En paralelo, Juan realiza otros trabajos “no oficiales” para proteger los intereses de las élites más poderosas del país, que ahora han puesto sus ojos en Ángel González, un político aparentemente anodino cuyos trapos sucios deberá buscar o “inventar” con la ayuda de Marta, la hija de un reconocido actor.
Crítica:
El amor romántico como fuerza todopoderosa de redención. Da igual que hablemos de comedias, de películas de acción o incluso de ciencia ficción, en todas ellas se pueden encontrar historias con una inocente mujer que hace cambiar al misterioso hombre solitario. En este caso Juan, personaje al que da vida Luis Tosar, es un agente de los servicios secretos. Como marioneta sobreexplotada y manejada por el personaje de Miguel Rellán, Juan se resigna recibir y obedecer órdenes haciéndose cómplice de actos repugnantes, como algunas de las escenas protagonizadas por Georgina Amorós que tiene un papel de los que calan hondo. O la protagonizada por Arón Piper, en uno de los casos más repulsivos de la película. Y Wendy, interpretada por Alexandra Masangkay, una chica filipina, empleada del hogar con una vida sencilla y humilde, será la encargada de hacer que Juan decida cambiar su vida para siempre.
Aunque parte de la premisa de la clásica historia de espías, mafias, tiroteos, persecuciones y conspiraciones, cuando las misiones del protagonista comienzan a superponerse creando así varias subtramas, el thriller de acción pasa a un segundo plano y te hace preguntarte cual es realmente el eje en torno al que gira la historia. Este es la evolución emocional y personal de Juan gracias a las dudas morales que se le van planteando a lo largo de la película. De esta manera, la historia de amor que Luis Tosar comparte con Alexandra Masangkay –a quien conocemos por sus trabajos en El hoyo o en Los últimos de Filipinas– acaba robándole el protagonismo a la trama policiaca y convirtiéndose en el hilo conductor sobre el cual se mueven las decisiones de nuestro protagonista.
Este thriller político –dirigido por Coira con un guion de Jorge Guerricaechevarría, conocido por sus reiteradas colaboraciones con el director Alex de la Iglesia– con ciertas referencias a una realidad no muy lejana ni ficticia, presenta una reflexión sobre la falta de escrúpulos, el poder y la manipulación de la información. Todo ello libre de cualquier tipo de ética y moral. ¿Es capaz el dinero y el poder de comprar la impunidad? Jorge Coira responde en esta película dejando a la vista el oscuro pozo de la corrupción en las altas esferas, los intereses de poder y el tráfico de influencias.
Es una película correcta, que mantiene la intriga hasta el último momento y es capaz de producir indignación e impotencia con los temas y casos abordados, pero se echan en falta sorpresas, giros inesperados de guion o algún personaje fuera de los arquetipos de este género.