
Seis días corrientes
Fresca, natural y, en ocasiones, algo infantil, la película de Neus Ballús contrasta con ese afán de hacer películas sociales desgarradoras y presumiblemente moralizantes. A menudo encontramos que la crudeza se proyecta para crear una empatía autocomplaciente y acomodada; el compromiso se reduce a escoger en la cartelera aquello que satisfaga esa necesidad de sentirse buena persona y que, finalmente, resulta otra superproducción europea más que explota y capitaliza discursos ajenos. Continúa leyendo Seis días corrientes